El no tiempo

El no tiempo te vive sin saberte,

intuyendo tu huella en el ahora

en ese no celebrar que te sucede

en el que estoy yo sola con tu sombra.

Otrora fue este día un día distinto

un día de promesas y de votos

que el tiempo hurtó a la vida con su pico

buscador de tesoros.

De entre los brazos del recuerdo,

treinta años después,

en mi retina yo rescato una foto

tu mirada oteando el horizonte

más allá de mis ojos.

MVF©

07/05/1994

07/05/2024

In memoriam

No vuelve atrás el tiempo
aunque la voz en off
permanezca guardada.
Lazos en el cajón
y fotos amarillas.
Fechas,
como sudokus
arrojados al suelo,
se desordenan
mientras el dado gira.
Saltas a la rayuela,
tu voz se enciende
brevemente en la llama
del tiempo.
Nidos de golondrinas
que no te conocieron.
La matriz del silencio
guarda, inmisericorde,
el código de tu existencia
y lo ignora
lo entierra
lo transforma en cenizas.
Y la caja
con los lazos
las fotos
las fechas
la voz
–tu voz en off–
se cierra.

(Poema para una amiga)

21/04/2024

Tiempo de kalanchoes

En el regazo de la tarde,
secas,
caen las cáscaras del tiempo.
Otra vez es otoño,
lava la lluvia los ayeres
y se lleva los sueños
que no fueron:
crisantemos azules
que no existen
y nadie compra
el día de los muertos.
Kalanchoes
apenas florecientes
guardan la entrada
de tu fosa.
Tu cuerpo de hojarasca,
seco, hueco,
no contiene tu risa:
libre ahora.

#poemasdeotoño

El musgo que cubre la piedra

La lluvia.
Como una metáfora
de las nubes de los ojos.
Yo escribo en la sala de espera,
mientras oigo llover.
Mis ojos llueven.
Bailan las letras sobre mis dedos.
El musgo que cubre la piedra
es el mismo
que la protege,
Recientes estudios demuestran
que el verdín depositado en los monumentos ejerce
una extraña función protectora
del daño de la luz.
Así es mi herida.
Sobre tu nombre escrito en piedra
yo acaricio el verdín y no lo quito
porque su grosor me recuerda
el tiempo sin ti
desde esta lluvia externa,
protectora,
que renueva la tierra.

#poemasdeotoño

Romper una piedra

Romper una piedra
amansarla con años
de ternura y abrir
su corazón en la noche.
Romper
muros de incertidumbre
con los puños.
No ver más allá de la dureza
fría del mineral.
Repetirse como un mantra
el objetivo de disparar
con las manos, con los ojos,
con la boca, con el cuerpo
y dejar
al corazón fuera.
Pero no.
No funciona.
Nunca.
Al final la sangre cuajada
imita a un bloque pero
no se convierte en piedra.

Agosto (IV)

Agosto es un mes cruel

empieza yéndose

como un burlesco

avatar de sí mismo.

Nada crece en agosto

bajo un sol que agoniza

solo las noches cuentan

verdades como puños

refrescando las muertes

que más nos han vencido.

hiel y vinagre

en el fondo del vaso

es el poso del hielo en la bebida.

Agosto no es un mes

no es una fiesta

agosto es la mentira de la vida.

Pídeme que escriba

Pídeme que escriba
no me pidas manteles
llenos de platos
plantas que morirán de hastío
fiestas llenas de gente solitaria
acomodos de nidos.
Pídeme que destape
mi frasco de las letras
y las deje caer entre mis dedos
en busca de un destino
que pronto olvidaré.
Pídeme que escriba.
Y yo escribiré sobre los árboles,
los postes, las murallas,
sacaré del armario
mi ruidosa letricia,
inventaré vocablos
desterraré gerundios, participios,
sembraré por el mundo
adverbios, conjunciones
vestiré de diario los pretéritos
regalaré sin miedo infinitivos.
Pídeme que escriba.
Y busca mis palabras por la casa
en servilletas, en papel de horno
en la contraportada de los libros,
sobre el aparador,
sobre las sábanas,
en constante derroche
y desatino,
guarda las que tú quieras para ti
y déjame escribir
libre y fecunda.

mvf©

Silencios

Segunderos de nada

componen los minutos

sueltas ramas de viento.

en brazos de los árboles

Sabes que no soy yo

quien ocupa este cuerpo

la víspera de tu nombre.

Música ciega de una larga noche.

#23/04/2023

DECREACIÓN

De qué escribir
Ahora
que me parece seco el pozo
de la inspiración
Ahora que han caído
todas las torres
y los pájaros sierran sus alas
al acero sin canto,
y las heridas
repudian su dolor.
Cuando ángeles entierran sus coronas,
y princesas arrojan sus laudes
al cielo
de los santos sin Dios.
Dime,
a qué ojos miraré que su vacío
me motive a escribir
de campos yermos y espigas sin trigo,
de niños huérfanos y madres sin reloj
de huéspedes sin casa o invitados sin mesa,
de horas sin segundero
o plañideras sin ningún pagador.
Y no es la lástima
Ni la ira
Ni la pena
Ni siquiera
la última compasión
Son los versos sin ritmo
vestidos sin cintura,
motores sin motor.
Porque no sabes
que en el país de las letras
las vocales
han perdido a mis ojos el color
e incoloras
circulan por el aire
vagas,
rotas,
cual fantasmas sin voz
me rozan
se insinúan
sin que mi cuerpo pueda
reaccionar a su frío
su calor,
porque he pasado un tiempo
una frontera
y no hablo su lenguaje
ya no soy
la que era,
la que escribía de cosas muy pequeñas,
y decía: hambre, frío,
labio roto, armazón
y al decirlo entreabría
puertas de armarios muy oscuros
que atravesaban mundos,
hacia secretas Narnias
porque yo
misma era una hada,
un elfo,
un duende
y ahora solo soy
aquella que va buscando letras
para escribir un algo
que no es
ni verso ni poema
ni opereta
solo DECREACIÓN.

©mvf

Deconstrucción

La muerte te construye
al destruirte.
Torna el viento a traer
tu rostro más feliz,
tu edad más joven,
cuando eras solo ayer,
cuando el mañana
era un alegre porvenir.
La muerte te viste ante mis ojos
con tu mejor sonrisa
con tu mejor humor.
Te construye después de derribarte,
decrea sobre tu faz para crearte
en cada nueva célula,
cada semilla, cada instante
que florece a la vez.
No te roba la muerte,
solo integra en los árboles,
los caminos, la vida,
cada parte de ti.
Tus gestos se posan en las alas
de cada tarde de septiembre,
retozan en el útero incipiente
de cada nuevo abril,
tu risa estalla libre entre las nubes
y te siento escribir en mi papel.
Cada día te descubro y te renombro.
A veces no se entiende que la muerte
es tan solo otra forma de vivir.

©mvf

16/09/2022